La hipótesis de la "puerta de entrada" - que los jóvenes que vapean tienen más probabilidades de pasar a cigarrillos más peligrosos - ha sido citada durante mucho tiempo como razón para prohibir las alternativas de nicotina.
Sin embargo, una nueva revisión de evidencia publicada en el Harm Reduction Journal concluye que el uso de vapeadores NO actúa como una puerta de entrada para que los adolescentes comiencen a fumar.
El estudio titulado ‘Gateway hypothesis: evaluation of evidence and alternative explanations’ encuentra que las políticas anti-vapeo basadas en el efecto de puerta de entrada podrían, de hecho, tener la "consecuencia no deseada de un aumento en el consumo de cigarrillos."
La investigadora Arielle Selya escribe: “Una preocupación importante sobre el uso de los ENDS [sistemas electrónicos de administración de nicotina] es la hipótesis de que pueden actuar como una puerta de entrada al consumo de cigarrillos entre los jóvenes. La evidencia que respalda esta explicación de puerta de entrada se basa en hallazgos que muestran que los jóvenes que usan ENDS también tienen más probabilidades de fumar cigarrillos.”Pero Selya dice que una interpretación más precisa de los hallazgos anteriores es que los jóvenes que son propensos a vapear también son más propensos a fumar cigarrillos.Un fallo importante
“... esta evidencia sufre de un fallo importante,” escribe ella. “Estos estudios no logran tener en cuenta completamente la tendencia preexistente de algunos jóvenes a usar productos de nicotina - ya sea por no incluir suficientes variables de responsabilidad común, o por no medir con precisión la responsabilidad común - e interpretan incorrectamente los resultados como el uso de ENDS causando que algunos jóvenes fumen.”La revisión encuentra que las tendencias de vapeo y fumar son “inconsistentes con la hipótesis de la puerta de entrada” y de hecho apuntan a que los vapes “desplazan los cigarrillos.”
Selya dice: “Las políticas basadas en la mala interpretación de un efecto causal de puerta de entrada pueden ser ineficaces en el mejor de los casos, y corren el riesgo de la consecuencia no deseada de un aumento en el consumo de cigarrillos.”
El informe dice que basado en la más probable “explicación de responsabilidad común,” donde los jóvenes que vapean tienen una tendencia preexistente a usar productos de nicotina, el caso contra los ENDS se debilita “hasta el punto donde, en algunos estudios, el uso de ENDS no presenta riesgos adicionales”.
Selya añade: “Diferentes líneas de evidencia también contradicen la explicación de puerta de entrada y apoyan la explicación de responsabilidad común, a saber, estudios de modelado de tendencias poblacionales que muestran que fumar es menos común entre los jóvenes ahora, de lo que se esperaría si los ENDS nunca hubieran estado disponibles.
“Esto plantea la cuestión de si los ENDS están desviando a los jóvenes de fumar cigarrillos alguna vez, lo cual es un área importante para futuras investigaciones.”