Acelerar la prohibición del vapeo sin un examen legislativo adecuado podría empujar a la gente a volver a fumar y devastar los pequeños negocios, ha advertido la asociación comercial de vendedores de vapeo de Irlanda.
El Proyecto de Ley de Salud Pública (Productos de Inhalación de Nicotina) de 2025 propone amplias restricciones al vapeo. Entre ellas, la prohibición de todos los sabores de e-líquidos que no sean de tabaco, y la prohibición de la importación, fabricación y venta de vapes desechables.
El proyecto de ley también introduciría normas estrictas para los envases, limitando los colores y las imágenes, y prohibiendo el uso de términos descriptivos más allá del nombre básico del sabor. La publicidad se limitará a las tiendas especializadas en vapeo.
No hay un control adecuado
Responsible Vaping Ireland (RVI), la asociación comercial del sector en Irlanda, ha escrito al presidente y a todos los miembros de la recién formada Comisión Mixta de Salud del Oireachtas, advirtiendo de que el proyecto de ley se está impulsando sin el debido escrutinio.
La RVI sostiene que tales cambios de gran alcance en las normas sobre el vapeo no deberían llevarse a cabo sin un examen exhaustivo por parte de los miembros del Oireachtas y una consulta significativa con las principales partes interesadas.
La organización profesional critica la decisión de la anterior Comisión de Sanidad de eludir el control prelegislativo, una medida que, según dice, está utilizando ahora el nuevo Gobierno para acelerar el proyecto de ley. La RVI advierte de que esto podría hacer que los ex fumadores volvieran a los peligrosos cigarrillos y forzar el cierre de pequeñas tiendas de vapeo en todo el país.
El Gobierno actual ha aprobado un proyecto de ley publicado antes de Navidad y ahora pretende publicar la versión completa sin remitirla antes a la reconstituida Comisión de Sanidad.
Aprovechar los retrasos
Según la RVI, se aprovecha del retraso en los nombramientos de las comisiones, provocado por las prolongadas disputas sobre el derecho a intervenir en la oposición de los TD Independientes (miembros electos del Dáil Éireann).
La RVI subraya la importancia de atenerse a procesos legislativos adecuados, especialmente cuando, dice, la Evaluación de Impacto Normativo del proyecto de ley no tuvo en cuenta su efecto sobre las pequeñas y medianas empresas (PYME).
El escrutinio prelegislativo es una función vital de las Comisiones del Oireachtas, que garantiza que se escuchen diversas perspectivas y que las leyes se elaboren con las mejores pruebas internacionales disponibles.
«Una legislación de esta envergadura debe basarse en pruebas y estudiarse detenidamente, no aprobarse a toda prisa en el Oireachtas sin un debate informado», declaró Lorraine Carolan, portavoz nacional de RVI.
Prohibiciones similares han resultado contraproducentes
Carolan señaló ejemplos internacionales en los que prohibiciones similares han resultado contraproducentes. «En países como Dinamarca y Estonia, hemos observado un aumento de las tasas de tabaquismo y un incremento de los productos de vapeo en el mercado negro, resultados tan graves que algunas de estas leyes se revirtieron posteriormente», afirmó.
Los datos siguen respaldando el vapeo como herramienta clave para dejar de fumar. Según la encuesta Healthy Ireland 2023, el 25% de los que dejaron de fumar utilizaron el vapeo como ayuda.
«Apoyamos plenamente la regulación responsable de la industria del vapeo», añadió Carolan. «Pero debe haber equilibrio: las pruebas demuestran que las prohibiciones generales a menudo pueden ser más perjudiciales que beneficiosas».
«Con más de 300 vape shops independientes funcionando en toda Irlanda y cientos de personas empleadas en el sector, esta legislación amenaza no sólo los resultados para la salud pública, sino también la viabilidad de las pequeñas empresas.»
La RVI insta a los diputados y senadores de la Comisión de Sanidad del Oireachtas a que sometan el proyecto de ley a un examen exhaustivo y consulten ampliamente a las partes interesadas antes de seguir adelante.
Aumento de los impuestos sobre el vape
La medida llega después de que en febrero se impusiera una tasa anual de 800 euros a los comercios que quisieran vender vapores.
En octubre, Irlanda introdujo un nuevo e importante impuesto de 50 céntimos por mililitro (ml) de e-líquido como parte de su presupuesto anual. El impuesto está muy por encima de la media europea de entre 0,10 y 0,30 euros, y añadirá 1,23 euros al coste de un vapeo típico en Irlanda.
Expertos internacionales en salud afirmaron que el nuevo impuesto pone en peligro la vida de los fumadores y supone un «retroceso en la lucha contra el tabaco.»
